domingo, 12 de octubre de 2008
Política Ambiental
La sociedad debe generar las estrategias para prevenir y minimizar los impactos y riesgos a los seres humanos y al ambiente, garantizando la protección ambiental de la localidad en la que se encuentra ubicada mediante la optimización en el uso de los recursos naturales, materias primas y energía, prevenir y minimizar la contaminación, los residuos y los impactos ambientales, adoptar tecnologías limpias y prácticas de mejoramiento continuo, apoyándose en estructuras como promoción de la producción más limpia y promoción de la autogestión y autorregulación ambiental empresarial. Las sociedades colombianas, sean o no industriales, propiciarán una administración ambiental sana y ayudarán a controlar el impacto de sus actividades, productos y servicios sobre el medio ambiente de acuerdo con las siguientes directrices:
1. Trabajo de Planeación: Las sociedades deberán conocer la normatividad ambiental que les sea aplicable e incorporarán dentro de su plan estratégico o ejercicio de planeación, programas de evaluación y mejoramiento ambiental que permitan dar cumplimiento a las disposiciones legales y cuando los costos resulten razonables frente a los beneficios obtenidos, desarrollar proyectos que vayan más allá de la exigencia normativa.
2. Trabajo de Prevención: Las sociedades asumirán políticas que enfaticen la prevención de la contaminación, a través del uso de tecnologías limpias y un manejo adecuado de los desechos industriales.
3 Tecnologías limpias: Las sociedades desarrollarán sistemas de administración ambiental en los procesos de producción diarios y propenderán por el manejo de tecnologías limpias en las diferentes etapas productivas con participación activa de los empleados, los proveedores y demás terceros.
4. Desechos industriales: Las sociedades desarrollarán sistemas eficientes de recolección, eliminación, almacenamiento y recirculación segura de desechos industriales.
5. Uso eficiente de los recursos: Las sociedades deberán desarrollar, diseñar, operar instalaciones, realizar actividades y proveer productos y servicios considerando el aprovechamiento eficiente de la energía y otros insumos, el uso sostenible de los recursos renovables, y la minimización de los impactos ambientales adversos.
1.6. Educación y promoción: Las sociedades adoptarán mecanismos para educar y promover la gestión ambiental, el uso adecuado de los desechos industriales, el desarrollo sostenible, y las tecnologías limpias entre los empleados, proveedores, contratistas y en la comunidad en donde opera la empresa.
1. Trabajo de Planeación: Las sociedades deberán conocer la normatividad ambiental que les sea aplicable e incorporarán dentro de su plan estratégico o ejercicio de planeación, programas de evaluación y mejoramiento ambiental que permitan dar cumplimiento a las disposiciones legales y cuando los costos resulten razonables frente a los beneficios obtenidos, desarrollar proyectos que vayan más allá de la exigencia normativa.
2. Trabajo de Prevención: Las sociedades asumirán políticas que enfaticen la prevención de la contaminación, a través del uso de tecnologías limpias y un manejo adecuado de los desechos industriales.
3 Tecnologías limpias: Las sociedades desarrollarán sistemas de administración ambiental en los procesos de producción diarios y propenderán por el manejo de tecnologías limpias en las diferentes etapas productivas con participación activa de los empleados, los proveedores y demás terceros.
4. Desechos industriales: Las sociedades desarrollarán sistemas eficientes de recolección, eliminación, almacenamiento y recirculación segura de desechos industriales.
5. Uso eficiente de los recursos: Las sociedades deberán desarrollar, diseñar, operar instalaciones, realizar actividades y proveer productos y servicios considerando el aprovechamiento eficiente de la energía y otros insumos, el uso sostenible de los recursos renovables, y la minimización de los impactos ambientales adversos.
1.6. Educación y promoción: Las sociedades adoptarán mecanismos para educar y promover la gestión ambiental, el uso adecuado de los desechos industriales, el desarrollo sostenible, y las tecnologías limpias entre los empleados, proveedores, contratistas y en la comunidad en donde opera la empresa.
Los Sistemas Gestión Ambiental en el Sector Empresarial
Autores:
Ing. Jeorbel Galano Fonseca
Consultor B Gestión Tecnológica Centro de Información y Gestión tecnológica. Guantánamo. Email: jeorbel@ciget.gtmo.inf.cu Teléfonos: 381139, 381196, 381602
Lic. Marvelis Vargas Leyva
Consultor B Gestión Tecnológica Centro de Información y Gestión tecnológica. Guantánamo. Email:Marvelis@ciget.gtmo.inf.cu Teléfonos: 381139, 381196, 381602
Ing. Jeorbel Galano Fonseca
Consultor B Gestión Tecnológica Centro de Información y Gestión tecnológica. Guantánamo. Email: jeorbel@ciget.gtmo.inf.cu Teléfonos: 381139, 381196, 381602
Lic. Marvelis Vargas Leyva
Consultor B Gestión Tecnológica Centro de Información y Gestión tecnológica. Guantánamo. Email:Marvelis@ciget.gtmo.inf.cu Teléfonos: 381139, 381196, 381602
Introducción
La explotación, conservación y protección del medio ambiente es un reto para el hombre de hoy y una garantía para la supervivencia de las nuevas generaciones. Los finales del milenio pasado y el comienzo del actual han sido testigo de cambios acelerados en las ciencias, la tecnología, los productos, los servicios, las necesidades de los clientes y el deterioro del medio ambiente que nos rodea, incidiendo en ello las guerras, el uso de recursos naturales de forma desmedida, entre otros factores. No obstante se observan organizaciones que se preocupan y emprenden acciones para aumentar su desempeño ambiental, como una vía para aumentar su competitividad, su ingreso a mercados más exigentes y con ello la satisfacción de las crecientes necesidades y expectativas de los clientes, proveedores, órganos reguladores y organizaciones ambientalistas.
En los últimos años a aumentado el número de empresas grandes, medianas y pequeñas que han visto a la conservación del medio ambiente que las rodea como una vía de mejorar su desempeño, por lo que han implementado estrategias ambientales que estimulen una gestión que permita coadyuvar al cumplimiento de los requisitos legales y reglamentarios y las expectativas de la sociedad en general. En nuestro país actualmente son pocas las empresas que se han insertado en el proceso de implementación de sistemas de gestión ambiental. Uno de los factores que lo ha frenado ha sido la falta de compromiso de algunas empresas con respecto al cuidado y conservación del medio ambiente, la no inclusión de los procesos de gestión ambiental en el ciclo de vida de los productos y servicios que realizan, la ¨ preocupación ¨ de estas por el incremento de sus costos derivados de estas actividades, así como la carencia en algunos casos de tecnologías para garantizar que las actividades que realizan tengan un impacto positivo en el medio ambiente. Por otro lado encontramos que existen condiciones muy favorables para la implementación de Sistemas de Gestión Ambiental, entre las cuales tenemos, el proceso de Perfeccionamiento Empresarial, la adopción de las familias de normas para los Sistemas de Gestión Normalizados tales como las ISO 14000 para los Sistemas de Gestión Ambiental, ISO 9000 para los Sistemas de Gestión de la Calidad e ISO 18000 para los Sistemas de Gestión de la Seguridad y la Salud del Trabajo, así como el Decreto Ley 81 de Medio Ambiente y el proceso de Reconocimiento Ambiental Nacional de la República de Cuba.
Las normas ambientales juegan un papel fundamental en la gestión empresarial, surgiendo para ofrecer herramientas y establecer un patrón de Sistemas de Gestión Ambiental a través del cual las mismas puedan sistematizar su gestión por medio de una política y metas ambientales que propicien el mejoramiento continuo con relación al medio ambiente. Las mismas consideran al Sistema de Gestión Ambiental en lo adelante SGA como la “Parte del sistema de gestión global de una organización que incluye la estructura organizativa, las actividades de planificación, las responsabilidades, las prácticas, los procedimientos, los procesos y los recursos para desarrollar, implantar, controlar, alcanzar, revisar y mantener la política ambiental de la misma”, por lo tanto el mismo es parte fundamental de la gestión integral que quiera realizar una organización.
Es imprescindible señalar que la implementación de un SGA propicia a las empresas la creación de una imagen verde y acceso a nuevos mercados, mayor satisfacción de los clientes, la conservación de la energía y la racionalización de actividades, menor riesgo de sanciones de los órganos reguladores e Incorporación del concepto de mejora continua, una economía más eficiente y el mejoramiento del control de los costos, satisfacción de criterios de inversión, un aumento de la vida útil de los productos y mejores cuidados con la disposición final de estos, la racionalización del uso de materias primas y otros insumos, la conservación de los recursos naturales, una disminución y control de los contaminantes, la armonización de las actividades con los ecosistemas, un aumento de la conciencia ambiental del trabajador y mejores condiciones de seguridad y salud del trabajo. Por otra parte la ausencia de un SGA puede traer consigo para la empresa pérdida de imagen, reputación y mercados, aumento de las pérdidas por desperdicios y por consiguiente de los costos, falta de confianza para los clientes y daños a su salud, aumento de la contaminación y agotamiento de los recursos naturales, cambios en el ecosistema y reclamaciones permanentes de las comunidades afectadas y aumento de la probabilidad de ocurrencia de accidentes de trabajo. En el caso de las empresas cubanas de hoy, la introducción de la dimensión ambiental no puede quedarse al margen del resto de los subsistemas de gestión de las mismas, pues urge su inserción en los mercados foráneos, por lo que deben mostrar y demostrar su interés por mejorar su desempeño ambiental, dar a conocer sus logros y obtener a corto o mediano plazo un reconocimiento a su accionar positivo con relación al medio ambiente que la rodea a través de la certificación por un tercero de su SGA.
Conclusiones
Asegurar que las consideraciones ambientales sean un componente integral en la toma de decisiones en las empresas, que los SGA sean una herramienta de dirección y que estén vinculados al cumplimiento sistemático y efectivo de la legislación vigente y el desarrollo de herramientas viables para una sólida gestión ambiental garantizará una mejora del desempeño de la empresa y de la calidad de vida de los trabajadores y la población, así como proveerá una garantía para las generaciones futuras. Por ello es imprescindible evaluar los aspectos de la interacción de cada empresa con el entorno que la rodea para mitigar impactos y darle solución de los problemas ambientales existentes relacionados con la calidad de vida de nuestra población. Siendo el actor principal de ello, los trabajadores de la empresa, los dirigentes y cada una de las personas involucradas a la misma, los cuales son los encargados de mejorar y promover una cultura y conciencia ambiental en la población que garantice el cuidado de los recursos que hay en nuestro planeta.
Recomendaciones
Recomendamos a las empresas y organismos de nuestro país que están en el proceso de implementación de sistemas de gestión ambiental que:
• Diseñen el sistema teniendo en cuenta sus características inherentes, ya que cada quién debe ¨ Usar el traje a su medida ¨.
• La alta dirección establezca en la práctica su compromiso hacia el desarrollo del sistema, involucren a todos sus trabajadores en este proceso, así como a sus clientes y proveedores.
• Dediquen suficiente tiempo y recursos a la aplicación y evaluación de la efectividad del sistema antes de solicitar la certificación.
• Fomenten valores que estimulen en sus trabajadores la creatividad y el orgullo hacia el cuidado del medio ambiente.
• Establezcan procesos para la mejora continua del sistema.
La explotación, conservación y protección del medio ambiente es un reto para el hombre de hoy y una garantía para la supervivencia de las nuevas generaciones. Los finales del milenio pasado y el comienzo del actual han sido testigo de cambios acelerados en las ciencias, la tecnología, los productos, los servicios, las necesidades de los clientes y el deterioro del medio ambiente que nos rodea, incidiendo en ello las guerras, el uso de recursos naturales de forma desmedida, entre otros factores. No obstante se observan organizaciones que se preocupan y emprenden acciones para aumentar su desempeño ambiental, como una vía para aumentar su competitividad, su ingreso a mercados más exigentes y con ello la satisfacción de las crecientes necesidades y expectativas de los clientes, proveedores, órganos reguladores y organizaciones ambientalistas.
En los últimos años a aumentado el número de empresas grandes, medianas y pequeñas que han visto a la conservación del medio ambiente que las rodea como una vía de mejorar su desempeño, por lo que han implementado estrategias ambientales que estimulen una gestión que permita coadyuvar al cumplimiento de los requisitos legales y reglamentarios y las expectativas de la sociedad en general. En nuestro país actualmente son pocas las empresas que se han insertado en el proceso de implementación de sistemas de gestión ambiental. Uno de los factores que lo ha frenado ha sido la falta de compromiso de algunas empresas con respecto al cuidado y conservación del medio ambiente, la no inclusión de los procesos de gestión ambiental en el ciclo de vida de los productos y servicios que realizan, la ¨ preocupación ¨ de estas por el incremento de sus costos derivados de estas actividades, así como la carencia en algunos casos de tecnologías para garantizar que las actividades que realizan tengan un impacto positivo en el medio ambiente. Por otro lado encontramos que existen condiciones muy favorables para la implementación de Sistemas de Gestión Ambiental, entre las cuales tenemos, el proceso de Perfeccionamiento Empresarial, la adopción de las familias de normas para los Sistemas de Gestión Normalizados tales como las ISO 14000 para los Sistemas de Gestión Ambiental, ISO 9000 para los Sistemas de Gestión de la Calidad e ISO 18000 para los Sistemas de Gestión de la Seguridad y la Salud del Trabajo, así como el Decreto Ley 81 de Medio Ambiente y el proceso de Reconocimiento Ambiental Nacional de la República de Cuba.
Las normas ambientales juegan un papel fundamental en la gestión empresarial, surgiendo para ofrecer herramientas y establecer un patrón de Sistemas de Gestión Ambiental a través del cual las mismas puedan sistematizar su gestión por medio de una política y metas ambientales que propicien el mejoramiento continuo con relación al medio ambiente. Las mismas consideran al Sistema de Gestión Ambiental en lo adelante SGA como la “Parte del sistema de gestión global de una organización que incluye la estructura organizativa, las actividades de planificación, las responsabilidades, las prácticas, los procedimientos, los procesos y los recursos para desarrollar, implantar, controlar, alcanzar, revisar y mantener la política ambiental de la misma”, por lo tanto el mismo es parte fundamental de la gestión integral que quiera realizar una organización.
Es imprescindible señalar que la implementación de un SGA propicia a las empresas la creación de una imagen verde y acceso a nuevos mercados, mayor satisfacción de los clientes, la conservación de la energía y la racionalización de actividades, menor riesgo de sanciones de los órganos reguladores e Incorporación del concepto de mejora continua, una economía más eficiente y el mejoramiento del control de los costos, satisfacción de criterios de inversión, un aumento de la vida útil de los productos y mejores cuidados con la disposición final de estos, la racionalización del uso de materias primas y otros insumos, la conservación de los recursos naturales, una disminución y control de los contaminantes, la armonización de las actividades con los ecosistemas, un aumento de la conciencia ambiental del trabajador y mejores condiciones de seguridad y salud del trabajo. Por otra parte la ausencia de un SGA puede traer consigo para la empresa pérdida de imagen, reputación y mercados, aumento de las pérdidas por desperdicios y por consiguiente de los costos, falta de confianza para los clientes y daños a su salud, aumento de la contaminación y agotamiento de los recursos naturales, cambios en el ecosistema y reclamaciones permanentes de las comunidades afectadas y aumento de la probabilidad de ocurrencia de accidentes de trabajo. En el caso de las empresas cubanas de hoy, la introducción de la dimensión ambiental no puede quedarse al margen del resto de los subsistemas de gestión de las mismas, pues urge su inserción en los mercados foráneos, por lo que deben mostrar y demostrar su interés por mejorar su desempeño ambiental, dar a conocer sus logros y obtener a corto o mediano plazo un reconocimiento a su accionar positivo con relación al medio ambiente que la rodea a través de la certificación por un tercero de su SGA.
Conclusiones
Asegurar que las consideraciones ambientales sean un componente integral en la toma de decisiones en las empresas, que los SGA sean una herramienta de dirección y que estén vinculados al cumplimiento sistemático y efectivo de la legislación vigente y el desarrollo de herramientas viables para una sólida gestión ambiental garantizará una mejora del desempeño de la empresa y de la calidad de vida de los trabajadores y la población, así como proveerá una garantía para las generaciones futuras. Por ello es imprescindible evaluar los aspectos de la interacción de cada empresa con el entorno que la rodea para mitigar impactos y darle solución de los problemas ambientales existentes relacionados con la calidad de vida de nuestra población. Siendo el actor principal de ello, los trabajadores de la empresa, los dirigentes y cada una de las personas involucradas a la misma, los cuales son los encargados de mejorar y promover una cultura y conciencia ambiental en la población que garantice el cuidado de los recursos que hay en nuestro planeta.
Recomendaciones
Recomendamos a las empresas y organismos de nuestro país que están en el proceso de implementación de sistemas de gestión ambiental que:
• Diseñen el sistema teniendo en cuenta sus características inherentes, ya que cada quién debe ¨ Usar el traje a su medida ¨.
• La alta dirección establezca en la práctica su compromiso hacia el desarrollo del sistema, involucren a todos sus trabajadores en este proceso, así como a sus clientes y proveedores.
• Dediquen suficiente tiempo y recursos a la aplicación y evaluación de la efectividad del sistema antes de solicitar la certificación.
• Fomenten valores que estimulen en sus trabajadores la creatividad y el orgullo hacia el cuidado del medio ambiente.
• Establezcan procesos para la mejora continua del sistema.
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